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En la línea histórica de la Venezuela contemporánea, el enfrentamiento verbal ocurrido entre el ahora extinto presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, y el líder del APRA, Alan García Pérez, no pasará desapercibido.

Fue el impulsor del ‘Socialismo del Siglo XXI, que en el marco de la campaña presidencial del año 2006, llenó de adjetivos a García Pérez, contrincante de Ollanta Humala, la figura política que por entonces contaba con el beneplácito del líder venezolano.

Todo se inició cuando Alan García criticó la reticencia de Chávez Frías y de Evo Morales a firmar Tratados de Libre Comercio entre países de la región latinoamericana y Estados Unidos. Según las crónicas periodísticas, lo llamó “caradura”.

Ante esto, Hugo Chávez, aprovechando un acto público en Nicaragua, “aseguró que Alan García estaba condenado a la derrota” (cosa que finalmente no ocurrió, pues el aprista ganó la elección presidencial).

“Si por obra del demonio el señor (Alan) García llega a ser elegido presidente del Perú voy a retirar mi embajador, porque con un presidente así, Venezuela no va a tener relaciones con el Perú”, exclamó Chávez Frías.

“No vamos a tener relaciones con un presidente de esta calaña, con un ladrón, con un tahúr. A ver si voy a una cumbre y me roba este billete”, agregó tras calificarlo de “sinvergüenza y ladrón de cuatro esquinas”.

El paso de los años, los encuentros en cumbres internacionales, y lo naturaleza misma de la política haría que ambos personajes se perdonen mutuamente y dejen atrás este recordado hecho.