(Foto: puntoedu.pucp.edu.pe)
Síguenos en Facebook
Autoridades de la Pontificia Universidad Católica se reunieron ayer con el prefecto de la Congregación para la Educación Católica, el arzobispo Gerhard Müller, quien a inicios de febrero le envió una carta a Juan Luis Cipriani pidiendo que la casa de estudios pueda seguir dictando el curso de Teología.
En particular, la carta le pedía al cardenal limeño a explicar las faltas que cometieron estos sacerdotes para que les retiraran la facultad de enseñar el curso y que, hasta que se tome una decisión sobre el asunto, puedan seguir dictándolo.
Sin embargo, la Santa Sede determinó que la misiva que carecía de valor oficial debido a que no fue enviada por medio de la Nunciatura Apostólica y correspondía a una iniciativa personal.
A inicios del 2012, Müller recibió un doctorado honoris causa por la PUCP en “reconocimiento a su ejemplar y fecundo aporte al desarrollo de los estudios teológicos contemporáneos”.
En la reunión participaron el rector de la PUCP, Marcial Rubio Correa, el vicerrector Académico, Efraín Gonzales de Olarte, el prefecto de la Congregación para la Educación Católica, cardenal Zenon Grocholewski y sus respectivos secretarios, indicó una nota de la propia universidad en la que no se indica el motivo de la reunión.
Cipriani negó a la Universidad Católica la difusión de la doctrina luego que esta decidiera no modificar sus estatutos para adecuarlos a la constitución apostólica “Ex Corde Ecclesiae”, dada por Juan Pablo II en 1990, como lo demandó la Congregación para la Educación Católica en agosto del 2011. Entre los cambios, la nueva constitución le otorgaba al obispo de Lima la facultad de elegir al rector.
