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Un total de 23 rehenes y 32 secuestradores murieron durante los cuatro días en que una planta de gas en Argelia estuvo bajo manos de un grupo islamista, indicaron el ejército de este país africano.
En la operación final del asedio, que tuvo lugar el sábado, los terroristas jihadistas asesinaron a siete de sus rehenes. En total, las fuerzas argelinas pudieron liberar a 685 de sus compatriotas y 107 extranjeros, informó un comunicado del ministerio del Interior citado por BBC News.
El presidente de Francia, Francois Hollande, defendió la operación del ejército del país africano, indicando que era la más apropiada “cuando se han tomado tantos rehenes” y los terroristas “están preparados para asesinarlos”.
La crisis comenzó el miércoles 16, cuando un grupo armado tomó por sorpresa dos buses que transportaban trabajadores extranjeros. En un comunicado, los secuestradores indicaron que el ataque era en represalia por la intervención militar francesa en Mali.
